sábado, febrero 17, 2007

¿Quién diablos fue Epiménides?

Me voy de “vacaciones”, lo que quiere decir, “me desconecto hasta nuevo aviso”.

Por cierto que descansar es “descansar de ciertas cosas para caer en otras”, por lo que el trabajo se encarga de demostrarnos que aquello de no hacer nada en realidad no es tan entretenido. Puede serlo una o dos semanas, pero no más. De ahí en adelante es vagancia, lo que acá es delito.

Están los anormales que nunca saben cuándo tendrán vacaciones, ya sean programadas o forzadas.

Considérenme un anormal.

Lo clásico sería contar cuáles son los planes.

De clásico, casi nada.

Cambian las caras y las tareas.

Otra cosa: me estoy moviendo de departamento...forzadamente. Hay cambios que realmente son molestos para el cuerpo y para el espíritu. Noto algo de resistencia en ambos lo que hace que el trabajo bruto de la mudanza sea dos veces más duro. Esto sería algo así como "siguiendo los caminos del señor".

Para el que reclama, insisto: es como cuando estas pensando en algo y se te cruza un heladero, el auto que te gusta, una chica, un chico, una señora, un globo, un delirio, un dolor, un auto, un bus, microbus, un carnicero, Yma Sumac, tu ex, tu cobrador, un perro, un conejo, un olor, un insulto, una mirada, un cenicero, un pepino, un llanto, la risa y la risotada...

En fin, ya vuelvo.

5 comentarios:

... dijo...

Hasta que vuelvas te estaremos esperando.
De la mudanza no voy a escribir, es un tema muy serio, tedioso y de mucho esfuerzo mental y físico... Quién fue Epiménides?

Anónimo dijo...

A pensar como monje zen...no le des muchas vueltas y hazlo....

damiatron dijo...

Aunque siempre parece poco, ha sido totalmente satisfactorio. Siyu next time!!!

cecilia dijo...

y la inauguración, cuando???

cecilia dijo...

y la inauguración, cuando???