sábado, mayo 17, 2008

anger is a gift


Enojarse es no perder la capacidad de asombro.

Me refiero a ese enojo grave, profundo, ese que no te deja pensar en nada más que lo que...te enoja. Porque los otros enojos son rabietas, esas de obsesivo u odioso. Nada grave.

Lo grave es que cada vez siento más la distancia; cada vez pienso más en no seguir por acá. La verdad, es que reafirma el deseo que tenemos y estos pequeños garbanzos en el suelo confirman que es la mejor decisión. El país se aleja.

La foto es parte de lo que se ve frente al escritorio de la casa. Imposible perder el rumbo.

No hay comentarios.: